Gurruchaga. José Pío
    [971](1881-1967)

 
   
 

       Fundador de las Auxiliares Parroquiales de Cristo Sacerdote, en 1927.   El sereno y celoso sacerdote José Pío Gurruchaga representa la figura del recio luchador del Evangelio, que se ofrece al servicio de la Iglesia y de las almas con sensibilidad apostólica y con piedad eucarística y mariana que nos deja llenos de admiración y sorpresa. Puso toda su vida al servicio de los hombres y de Dios, sin hacer distinción de personas o lugares.   Nació en 1881 en Tolosa (Gui­púzcoa). Su padre, Florencio Gurruchaga, es maestro de la localidad, falleció muy pronto y su madre hizo todo lo posible por darle una buena educación.
  Estudió en el Semi­nario Ma­yor de Vitoria y luego culminó en Zaragoza su Licenciatura en Teologia El 23 de Diciembre de 1905 fue ordenado sacerdote.  El El 9 de Enero de 1906  fue designado Coad­jutor de la Parroquia de Santa María del Juncal en Irún (Guipúzcoa) y se dedicó con ardor a la obra de la catequesis. Y a la atención de los jóvenes de la Ac­ción Católica.
   En 1909 fundó en la Parroquia la obra euca­rística llamada "Los turnos de S. Tarsicio", para fomentar la piedad euca­rística. También fundó las "Marías de los Sagrarios". No tarda en estimular la pie­dad con los "Jue­ves eucarísticos" y con diversas devociones. En 1913 inició el Sindicato Femenino de Obreras Católicas y fomentó los sindicatos de Ferroviarios, de los que fue nombrado Consiliario el 3 de Di­ciembre de 1916.
   Fue el primero en introducir en 1917 en  España la Obra Misional del Clero Indígena, fundada en Francia por Estefanía Cottin y su hija Juana de Bigard.
   En  1926 inició el Instituto de Cooperadoras como  Pía Unión viviendo en Co­muni­dad que más tarde sería reconocida como Congregación Reli­gio­sa del Derecho Pontificio de "Auxiliares Parroquiales de Cristo Sacerdote".
   En 1936, nombrado por el Cardenal Segura Consiliario Na­cional de la Acción Católica Femenina, debió dedicarse a viajar por España para animar la Asociación. Al proclamarse la república el 14 de Abril, se abrió una casa en Biarriz. Pero e 1936 tuvo que salir de España ante la ola de persecuciones que se desencadena y el incendio de la casa de Irún el 29 de Agosto de este año.
   En  1939 es nombrado Consiliario de los Hombres de Acción Católica, se entregó de lleno a promover su espíritu cristiano y restañar las heridas de la guerra.
   Su vida se mantuvo siempre activa en estos ambientes hasta que en 1967, el 22 de Mayo, falleció en Bilbao, sin llegar a conocer la aprobación de las Hermanas como Congregación religiosa de Derecho pontificio, hecho acontecido el 15 de Febrero de 1968. Dejaba 18 comunidades y 60 Herma­nas