|
Literalmente recoge el término griego de gobernar (kibernao) y alude a la ciencia del control de mecanismos neurológicos en biología y de servomecanismos automáticos en ingeniería. Este último concepto es el que más se ha divulgado.
Hoy se tiende a diferenciar cibernética (automatismos), informática (informaciones tecnificadas) e internética (interconexiones para comunicación en redes nucleares de apertura mundial.
El incremento masivo de los automatismos de uso, electrónicos o meramente mecánicos, hace a esta ciencia una verdadera sorpresa en los tiempos actuales, la cual lleva desde la apertura a distancia de las puertas hasta los ingenios (robots) de producción, distribución o interconexión de productos o incluso de juegos automatizados.
Las máquinas automáticas en los tiempos actuales son invasoras y de uso masivo. Son de tres tipos sobre todo: secuenciales (programadas), adaptativas (o reflejas) y reguladas (o de respuesta natural).
Invaden la vida moderna y evidentemente reclaman actitudes educativas nuevas que hacen peligrar la libertad del hombre. Ello quiere decir que se abren interrogantes éticos, por ejemplo sobre los efectos en el hombre de los mecanismos. Nuevos fenómenos invaden el panorama educativo: teleadicción, cibersexo, ludopatías, etc.
Los educadores, sobre todo de la fe, tienen hoy el enorme desafío de despertar la conciencia del hombre hecho a imagen y semejanza de Dios, que es infinitamente libre, y debe regirse por la inteligencia y la voluntad. Es un deber de conciencia declararle libre y no dejarse esclavizar por la electrónica, la ofimática o la neurotecnología que pueden llevar al hombre a una nueva esclavitud de consecuencias imprevisibles.
|
|
|
|
|