|
Enfermedad convulsiva del sistema nervioso que anula la conciencia en los momentos de acceso fuerte y genera cierta predisposición a la irritación y al nerviosismo.
Por la espectacularidad de muchas de las convulsiones que acontecen en los episodios manifestativos, en los tiempos antiguos se la consideraba vinculada a fuerzas espirituales, especialmente diabólicas. Por eso se la identificaba con la posesión por el demonio, permanente o transitoria y se obraba en consecuencia. Evidentemente la medicina moderna descarta toda causalidad extranatural en sus manifestaciones y determina que se debe obrar en consecuencia.
Algunas interpretaciones de las posesiones diabólicas que se reflejan en el Nuevo Testamento ingenuamente identifican la idea de posesión con los ataques epilépticos, llegando incluso algunas traducciones a recoger el término de epilepsia (epilepsis, en griego).
El texto original indica 11 veces el concepto "endemoniado" (daimoniotosomenous), de las 86 en que aparece el concepto “demonio” (daimoné), además de las 39 que se habla de diablo (dia-bolos) y de las 36 que alude al adversario o enemigo (satanás). (Mc.1. 32; Mt. 8.28; Lc. 36.2; Jn. 10. 21)
|
|
|
|
|