|   | 
        Lugar  en que son castigados lo pecadores, según las 11 veces que aparece en los  Sinópticos (7 en Mt; 5. 22, 29 y 30; 10. 28; 18. 9; 23. 15 y 33; 3 en Mc. 9.  43, 45 y 47; y 1 en Lc. 12.5) y la que hay en Sant. 3. 6. Tiene un sentido de  castigo por fuego, origina temor y debe ser evitada por la práctica del bien. 
   Probablemente es nombre simbólico abreviado  (Gehinnon, valle de Hinnon) y en griego "gehena" y es paralelo a los  otros que aluden al más allá: abismo o tártaro (buzos o abysmos) que aparece  10 veces y haces (hades) o infierno, que aparece otras 11 veces. 
   El concepto aludía a un valle cercano a Jerusalén,  convertido en basurero, por el culto que allí se dio a Molok (2 Rey. 10. 3) y  su posterior exterminio (2 Rey. 23. 10). Pero popularmente se identificaba  con el lugar de los réprobos a donde irían a penar a la hora de la muerte. 
   En la  tradición judía fue considerado luego como lugar de castigo, sobre todo desde  el siglo II cuando se formuló la teología posterior a las destrucciones de  Palestina. Y de los ámbitos judíos pasó a los cristianos, que fueron  alejándose de la gehenna judía para sospechar otro lugar o estado de tormento  para los pecadores muertos sin arrepentimiento. 
       
     
    
    
        
         | 
      | 
      | 
      | 
      |