Hormonas
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     Son secreciones mínimas en cantidad pero básicas en funcionalidad que produ­cen las glándulas endocrinas. El nombre se lo dio en 1905 el fisiólogo inglés H. Starlin. Se dicen endoncrinas por ir directamente al circui­to sanguíneo, a diferencia de las exocri­nas.
   Los rasgos psicológicos están estre­chamente ligados a las hormonas, más directa o indirectamente, aunque las teoría bioquímicas al respecto sufren en los últimos años muchos interrogantes que todavía no es fácil dilucidar, pero que no anulan lo fundamental de la teorías clásicas.
   El carácter agresivo depende de la adrenalina de las cápsulas suprarrenales; la inteligencia tiene que ver con la yodotiroglobulina de las glàndulas tiroides; el celo sexual se vincula con las gonadotrofinas: la tetosterona, la andosterona y la oestrina, producidas en la hipófisis y en las gónadas o en los ovarios.
   El conocimiento somático del educan­do contribuye a que se expliquen en ocasiones sus comportamientos o sus actitudes, incluyendo los aspectos éticos y religiosos. Sin caer en biologismo exagerado, es indiscutible su importancia.