| |
Herejía relativa a la gracia divina, que se extendió entre los monjes del sur de la Galia y que consistía en suavizar la doctrina de Pelagio, condenado por San Agustín en el siglo V.
Los semipelagianos sostenían cierta independencia del hombre con respecto a la acción de Dios. Pensaban que son las obras buenas, las penitencias y las plegarias, las que santifican al hombre por su propio mérito. Con ello dejaban en mal lugar la acción de la gracia divina.
Tal doctrina, además de imprecisa, se alejaba de la enseñanza del Evangelio: "Yo soy la vid, vosotros los sarmientos... Sin mí nada podéis hacer." (Jn. 15.5)
|
|
|
|
|